Silvana Vilaseca Ch.
DESPACHANTE DE ADUANA – VILASECA ORIENTE S.R.L.
DESPACHANTE DE ADUANA – VILASECA ORIENTE S.R.L.
Si hay algo que define el
Comercio Exterior, sin duda, es el cambio y la evolución constante. Llevo más
de 20 años en el rubro, siendo testigo desde diferentes escenarios del
constante movimiento y transformación de los procesos y normativas que van de
la mano con la evolución misma del planeta y su nueva era.
Los cambios
principales se han dado a raíz de los atentados el 11 de Septiembre de 2001, y
han generado desde la misma Organización Mundial de Aduanas (OMA) nuevas
medidas de control para el intercambio comercial de mercancías, afectando a
todas las áreas involucradas, especialmente a las Aduanas, a quienes les
asignaron una importante misión: la seguridad, cambio importante que repercutió
en el transporte internacional, en los importadores, exportadores, depósitos
aduaneros, puertos, aeropuertos, entidades gubernamentales de controles
sanitarios y ambientales, Despachantes de Aduana y todos aquellos actores que
componen la cadena logística internacional.
Sin embargo, y a pesar
de los cambios generados por distintas razones tanto a nivel global como en
cada país individuamente, siempre ha habido un actor importante que se ha
mantenido, testigo de la evolución del comercio exterior, y que sin duda es
quien resguarda en su historia, los mayores registros de estos cambios en el
transcurso de los años y por qué no, de las eras.
Este actor es el
Despachante de Aduana, Agente de Aduanas, Corredor de Aduanas o Agente Aduanal,
como se nos conoce en otros países, que se encuentra autorizado por los Estados
para ejercer la función principal de resguardar los intereses de nuestros
países, filtrando a través de nuestra actuación, el cumplimiento de los
requisitos de toda mercancía que ingresa por nuestras fronteras, además de
apoyar al Gobierno con la recaudación de los tributos que ésta debe pagar por
su nacionalización, amparados en los Acuerdos Internacionales vigentes.
Somos los Despachantes
de Aduana, quienes a través de los tiempos nos hemos mantenido alineados a las
Aduanas y a las diferentes normativas que van surgiendo y cambiando con la
evolución del Comercio Exterior. En Bolivia, somos alrededor de 200
profesionales, entre estos, personas con vasta experiencia, que han sido
testigos de diferentes cambios, restricciones y otras medidas que a su paso adoptaron
los diferentes Gobiernos de turno, hemos visto pasar funcionarios en las
instituciones públicas, importadores y exportadores, empresas que con el tiempo
han cerrado, o han salido del país, hemos visto cambiar las normas, los
requisitos, los formularios, etc.
Hoy por hoy, somos
testigos de la modernización de nuestra aduana, con la informatización de los
sistemas, simplificación de procedimientos, cambios importantes con relación a
los últimos 10 años, que los Despachantes de Aduana, acompañamos y apoyamos ,
porque con nuestra actuación somos el brazo ejecutor de estos cambios y una vez
más testigos de la evolución constante.
El valor del
Despachante de Aduanas, está en la implementación de nuevas tecnologías para ir
de la mano con los cambios, en la mejora continua, adquiriendo diferentes tipos
de certificaciones internacionales y nacionales para estar a la altura de lo
que el comercio exterior actual exige.
Entonces, encontramos
que el valor del Despachante de Aduanas, se encuentra más que en el paso del
tiempo, en su experiencia, en sus aciertos y por qué no decirlo, también en sus
errores; nuestro valor es ser testigos de la evolución del mundo mismo y su
integración comercial y económica de la cual sin duda estamos entre los
protagonistas.
El valor de un
Despachante de Aduanas, también se mide en el equipo que lo acompaña, su
columna vertebral, ya que detrás de cada Despachante existe una Agencia
Aduanera que cuenta con personal capacitado, con formación profesional y
técnica adquirida, con vocación de servicio al cliente, con permanente
capacitación sobre nuevas normativas, testificando así también la evolución del
comercio. Entonces el valor del Despachante de Aduanas, está en el compromiso
de crear y mantener fuentes de trabajo para su personal y por ende para sus
familias, por quienes se preocupa de que siempre tengan un plato en su mesa.
El valor del
Despachante de Aduanas, está en la responsabilidad que afronta ante su mayor
aliado y a la vez su mayor juez, la Aduana Nacional ya que por ley es
responsable solidario con los importadores con los que trabaja, muchos de los
cuales pueden ir cerrando en el camino por distintas razones, y sin embargo es
el Despachante de Aduanas quien queda para afrontar los controles posteriores,
que debieran ser por sus competencias y no por las actuaciones de sus
eventuales comitentes.
El valor del
Despachante de Aduanas también está en capacitar y transferir a las futuras
generaciones los conocimientos adquiridos a través de su historia, creando así
una cadena que traspase las barreras del tiempo.
El valor del
Despachante de Aduanas está en un trabajo conjunto con las diferentes entidades
gubernamentales, como nuevos procedimientos, pruebas piloto o sugerencias para
de esta manera, poder plasmar la facilitación al comercio, que es una línea a
nivel mundial.
El valor del
Despachante de Aduanas, está también en su permanente capacitación y
actualización sobre el cambio de las diferentes normativas, tanto nacionales
como internacionales, para dar un correcto asesoramiento a sus clientes
formales y dar cumplimiento a las exigencias de la Aduana Nacional.
Los Despachantes de
Aduana, somos actores pocas veces reconocidos, pero nuestra labor tiene un
valor muy importante, ya que somos el nexo del comercio exterior entre el sector
público y el privado, generamos fuentes de empleo, coadyuvamos con nuestra
labor a la elaboración de estadísticas gubernamentales, y apoyamos en la
recaudación de tributos aduaneros. Somos empresas privadas que aportamos con
nuestros impuestos, somos personas en busca siempre de un crecimiento
profesional con apego a la ética, a la ley y a las normas vigentes, para de
esta manera afrontar los diferentes desafíos que involucran los cambios en el
Comercio Internacional.
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